HORA NONA Martes de la XXXIII semana del tiempo ordinario. HORA #NONA #LiturgiaDeLasHoras #LectioDivina 15 de Noviembre Martes de la XXXIII semana del tiempo ordinario www.liturgiadelashoras.com.ar/…Más
HORA NONA Martes de la XXXIII semana del tiempo ordinario.

HORA #NONA #LiturgiaDeLasHoras #LectioDivina 15 de Noviembre Martes de la XXXIII semana del tiempo ordinario www.liturgiadelashoras.com.ar/sync/2016/nov/15/nona.htm INVOCACIÓN INICIAL V. Dios mío, ven en mi auxilio R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya. Himno: FUNDAMENTO DE TODO LO QUE EXISTE Fundamento de todo lo que existe, de tu pueblo elegido eterna roca, de los tiempos Señor, que prometiste dar tu vigor al que con fe te invoca. Mira al hombre que es fiel y no te olvida, tu Espíritu, tu paz háganlo fuerte para amarte y servirte en esta vida y gozarte después de santa muerte. Jesús, Hijo del Padre, ven aprisa en este atardecer que se avecina, serena claridad y dulce brisa será tu amor que todo lo domina. Amén. SALMODIA Ant 1. Dichoso el que anda por los senderos del Señor. Salmo 118, 1-8 HIMNO A LA REVELACIÓN DE LA LEY Dichoso el que, con vida intachable, camina en la voluntad del Señor; dichoso el que, guardando sus preceptos, lo busca de todo corazón; el que, sin cometer iniquidad, anda por sus senderos. Tú promulgas tus decretos para que se observen exactamente. Ojalá esté firme mi camino, para cumplir tus consignas; entonces no sentiré vergüenza al mirar tus mandatos. Te alabaré con sincero corazón cuando aprenda tus justos mandamientos. Quiero guardar tus leyes exactamente, tú no me abandones. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Ant. Dichoso el que anda por los senderos del Señor. Ant 2. Se alegra mi corazón con tu auxilio. Salmo 12 - SÚPLICA DEL JUSTO EN SUS DIFICULTADES COTIDIANAS ¿Hasta cuándo, Señor, seguirás olvidándome? ¿Hasta cuándo me esconderás tu rostro? ¿Hasta cuándo he de estar preocupado, con el corazón apenado todo el día? ¿Hasta cuándo va a triunfar mi enemigo? Atiende y respóndeme, Señor, Dios mío; da luz a mis ojos para que no me duerma en la muerte, para que no diga mi enemigo: «lo he vencido», ni se alegre mi adversario de mi fracaso. Porque yo confío en tu misericordia: alegra mi corazón con tu auxilio, y cantaré al Señor por el bien que me ha hecho. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Ant. Se alegra mi corazón con tu auxilio. Ant 3. Dios lo incluyó todo bajo el dominio del pecado para poder compadecerse de todos. Salmo 13 - CORRUPCIÓN Y NECEDAD DEL IMPÍO. Dice el necio para sí: «No hay Dios.» Se han corrompido cometiendo abominaciones, no hay quien obre bien. El Señor observa desde el cielo a los hijos de Adán, para ver si hay alguno sensato que busque a Dios. Todos se extravían igualmente obstinados, no hay uno que obre bien, ni uno solo. Pero ¿no aprenderán los malhechores que devoran a mi pueblo como pan y no invocan al Señor? Pues temblarán de espanto, porque Dios está con los justos. Podéis burlaros de los planes del desvalido, pero el Señor es su refugio. ¡Ojalá venga desde Sión la salvación de Israel! Cuando el Señor cambie la suerte de su pueblo, se alegrará Jacob y gozará Israel. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Ant. Dios lo incluyó todo bajo el dominio del pecado para poder compadecerse de todos. LECTURA BREVE Jb 5, 17-18 Dichoso el hombre a quien corrige Dios: no rechaces el escarmiento del Todopoderoso, porque él hiere y venda la herida, golpea y cura con su mano. V. Trata con misericordia a tu siervo. R. Enséñame tus leyes. ORACIÓN OREMOS, Dios nuestro, que enviaste un ángel al centurión Cornelio para que le revelara el camino de la salvación, ayúdanos a trabajar cada día con mayor entrega en la salvación de los hombres, para que, junto con todos nuestros hermanos, incorporados a la Iglesia de tu Hijo, podamos llegar a ti. Por Cristo nuestro Señor. Amén. CONCLUSIÓN V. Bendigamos al Señor. R. Demos gracias a Dios.